Qué pasó con el departamento de Alberto Nisman 10 años después

Enero es un mes de calma en la Ciudad de Buenos Aires, y mucho más en el barrio de Puerto Madero. La quietud y la discreción caracterizan sus desiertas calles, en las que no se escucha nada. Por eso resultó sorprendente cuando los vecinos del fiscal Natalio Alberto Nisman declararon no haber escuchado el disparo que acabó con su vida. Hoy, a 10 años de aquel 18 de enero de 2015 en el que su cuerpo fue encontrado en el baño de su departamento en la Torre Boulevard del complejo Le Parc, el silencio continúa.

Las tres torres del conjunto se ubican en la irregular manzana, de forma vagamente triangular, conformada por las calles Azucena Villaflor, Aimé Painé y Marta Lynch. Desarrolladas por el empresario Moises Khafif, se terminaron de construir en 2008 y cuentan con pileta climatizada, gimnasio, pileta con solarium, sala de juegos para niños, salón de fiestas, grupo electrógeno, lavandería y seguridad las 24 horas.

La que se encuentra en el medio del trío, Boulevard, fue el centro de todas las miradas a partir de la noticia de que el fiscal de la causa AMIA había sido encontrado muerto en el baño del departamento en el que vivía, a horas de presentarse en el Congreso para presentar su denuncia contra varios funcionarios, entre ellos la entonces presidenta Cristina Kirchner por supuesto encubrimiento a los sospechosos iraníes del atentado.

Qué fue del departamento de Alberto Nisman a 10 años de su muerte

El departamento 2 del piso 13 de la Torre Boulevard pasó un largo tiempo vacío tras el hallazgo del cadáver de Nisman: estuvo 10 meses bajo custodia judicial. Recién allí su dueño, Héctor Edgardo Acevedo, pudo ofrecerlo nuevamente en alquiler. Sin embargo, no fue fácil. Lo sucedido allí dentro espantaba a los potenciales inquilinos hasta que finalmente concretó con un matrimonio de italianos.

Según reveló Acevedo en sus declaraciones judiciales, por el departamento de 136 metros cubiertos y dos dormitorios, el fiscal pagaba $26.500 en concepto de alquiler, incluyendo la cochera, la baulera, el impuesto de ABL y las expensas. A la cotización oficial de la divisa estadounidense equivalían a u$s3.079, mientras que al blue eran u$s1.934.

En las últimas publicaciones en sitios inmobiliarios, que datan de fines de 2022, el precio de alquiler estaba cerca del promedio entre ambas cifras: u$s2.600. También se ofrecía a la venta por u$s850.000.

En aquel entonces, una nota de La Nación dio cuenta de que un nuevo inquilino, también de nacionalidad italiana, ocupaba la vivienda. "Impecable departamento de tres ambientes en Torre Le Parc Piso 13. Impresionante vista, 136 metros cuadrados cubiertos y balcón terraza de 8 metros cuadrados. Dos dormitorios en suite con vestidor, living comedor, amplia cocina con comedor diario; dos cocheras; una baulera en primer subsuelo. Full amenities", rezaba el anuncio, que había estado vigente durante varios meses en busca de interesados.

Según revelaron vecinos al matutino, el nuevo habitante era "un hombre canoso, alto y que viaja mucho", que se mudó desde la Torre Río, perteneciente al mismo complejo.

Al estar en el país desde hace tiempo, este italiano probablemente esté al tanto de que pasa sus días en una vivienda que ya forma parte de las crónicas policiales argentinas, que sigue siendo objeto de comentarios de los turistas tanto nacionales como extranjeros que pasan por allí y que, a diez años y sin que se haya esclarecido lo que pasó, sigue guardando un sepulcral silencio.