En su editorial, el periodista y conductor de La Mañana por la AM 750 analizó las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires y aseguró que el único rival del fascismo de la época es el peronismo. Elecciones en una "Ciudad de Pobres Corazones".
El editorial de Víctor Hugo Morales
La interna de la derecha en la ciudad de Buenos Aires dejó algunas postales. Milei entrando como un payaso que se vuelve loco al festejo, Macri en TN explicando que tenía que ir al mundo árabe diciendo algo que no se entendió muy bien de Vargas Llosa, Larreta haciendo el Topo Gigio.
Milei define a la ciudad en la apatía del electorado, y en la falta de valores de los que sí votaron. Su habilidad —que la tiene— fue hacer de la elección un referéndum de su gobierno, que si en algún sitio satisface, por supuesto que es en las ciudades más ricas.
Macri se basó en la Ficha Limpia, el caballito de batalla de Lospennato. Quiso hundir a una adversaria, y se quedó moviendo los brazos en las arenas movedizas de la ciudad.
Hasta le apareció Larreta gastándolo con el Topo Gigio de Riquelme. Queda Marrita, pobre. Con los dos tipos y uno partido por la mitad que lo votaron, no puede entrar ni al boliche porque lo toman para la chacota.
También la ciudad enseña en su malicia que, para jugarle a la derecha, habrá que ser lo que se es. El único rival del fascismo de la época es el peronismo, y será con los dos dedos en V que vuelva a la victoria que, "hasta siempre", lo espera.
Será con los brazos como saludando en el balcón, y será la marcha y la disfonía de pueblo que se defiende de una feroz oligarquía y de la traición de clase de los propios. Será siendo lo que es, o no será nada.
La política es así. Macri, que se pensó que iba a ser el gran ordenador, está ahí sentado en TN explicando a su jefe qué es lo que pasó.
Larreta, que iba a ser presidente, medio escondido como el que se asoma en el teatro para ver cuánta gente vino. Y Marra, provocando pena y vergüenza ajena.
Pero si Macri camina por la vida habiendo hundido a un país, y Larreta mete un ocho en la ciudad con la que bailó el tango de la corrupción, todos tienen una chance de volver. La ciudad de pobres corazones siempre tiene uno para ellos.
FUENTE: PAGINA 12