Las precipitaciones y la denodada lucha de más de 3.800 personas, entre bomberos, brigadistas, agentes municipales, técnicos, fuerzas armadas, de seguridad y voluntarios, generaron una importante disminución de los incendios en el territorio correntino; no obstante se mantiene la guardia en alto y la alerta máxima, dado que hay focos que pueden volver a extenderse. Las muestras de solidaridad del país han sido conmovedoras, registrándose apoyos a Corrientes que merecen destacarse y ponderarse en su verdadera dimensión.