Dentro de dos semanas, los derechos de exportación volverán a ser del 33% para el poroto de soja, 31% para derivados y del 12% para el maíz. Desde el Gobierno no dieron indicios sobre una extensión del beneficio.
El próximo 30 de junio finaliza la quita de retenciones fijada por el Gobierno a ciertos productos en el campo y desde asociaciones ruralistas de Tucumán, Salta y Córdoba anticipan una "situación insostenible" y piden que se reconsidere extender el beneficio.
Así, se restablecerán los los derechos de exportación de un 33% para el poroto de soja, 31% para sus derivados y 12% para el maíz.
En Tucumán, desde la Asociación Civil de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor), publicaron un comunicado, titulado "Una muerte anunciada", donde revelan que "la zona norte del país se encuentra en total desventaja respecto a otras áreas geográficas, con rindes diferentes y altos costos de flete en los cultivos de granos más nobles que tiene esta región, como la soja y el maíz".
Para la entidad, las retenciones son un "sistema malévolo de cobro de impuestos a los que producen bienes exportaciones, que solo está generando el quebranto y la desaparición de productores agropecuarios, con el consiguiente éxodo de las poblaciones rurales del NOA y NEA".
“Llevamos más de dos décadas de una fenomenal transferencia de recursos que desde las provincias más postergadas terminan distribuidos por el Estado Nacional en las provincias más ricas. Los productores recibimos como contraprestación una red vial en emergencia, niveles de inseguridad preocupantes, solo por mencionar los problemas más acuciantes”, agregan.
Por su parte, Alfredo Figueroa, titular de la Sociedad Rural Salteña cuestionó que con la restitución de las retenciones se "le quitan al campo salteño unos 180 millones de dólares al año".
"Imaginate lo que se podría hacer si esa plata quedara en la provincia y se reinvirtiera en el sector. Sería un dinamizador enorme, sobre todo para el interior”, afirmó en declaraciones radiales. En este marco, describió a la carga impositiva como "casi confiscatoria" y desalienta la producción.
"Estás arriesgando todo lo que tenés -clima, insumos y financiamiento- pero el Estado se queda con un tercio de lo que producís sin haber puesto nada. Así no se puede crecer", denunció el ruralista.
Pese a las críticas, valoró como un cambio de enfoque la intención del Gobierno de avanzar en una simplificación del esquema fiscal: "Eso sí lo destaco como algo positivo. Vemos una mirada distinta respecto a otros gobiernos: menos burocracia, más apoyo al que produce, señales de querer simplificar y reducir esta maraña impositiva que nos ahoga", expresó.
Desde las sociedades rurales nucleadas bajo el Arco Noroeste de Córdoba, que lidera la Sociedad Rural de Jesús María, también manifestaron por medio de un documento su "profunda preocupación ante la inminente vuelta de las retenciones o derechos de exportación (DEX) a los granos, luego de una baja temporal que había sido interpretada por muchos productores como una señal de cambio".
Para dichas asociaciones, consigna la información de Ámbito, las retenciones "representan una regresión que no solo afecta la rentabilidad, sino que golpea de lleno la confianza que el sector puso -una vez más- en la posibilidad de construir un país distinto, con reglas claras, previsibilidad y un verdadero federalismo productivo".