El máximo tribunal de la justicia provincial otorgó 90 días de licencia a la magistrada y ordenó al Procurador General que evalúe su desempeño.
La Corte Suprema de Justicia de la provincia de Buenos Aires suspendió por 90 días a la jueza Julieta Makintach, acusada de haber participado en la grabación de un presunto documental basado en el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona.
Asimismo, se instruyó al Procurador General Julio Conte Grand que evalúe el desempeño de la jueza "en los términos de la Ley Nº 13.661, en orden a la pertinencia de la acusación de conformidad con el artículo 182 de la Constitución Provincial".
Con la firma de su presidenta Hilda Kogan, el vicepresidente Sergio Gabriel Torres y el ministro Daniel Fernando Soria, el máximo tribunal provincial señaló que el análisis inicial de los antecedentes puestos de relieve y la presentación efectuada por la Subsecretaria de Control Disciplinario del Tribunal permiten advertir las "características inusitadas" de la participación que habría tenido la mencionada magistrada en un film o video, supuestamente documental, referido al proceso penal (...) "a cuyo desarrollo debía destinar su excluyente atención".
El dictamen expresó además que Makintach tuvo "cuanto menos, una conducta alejada de la sobriedad, la mesura y la corrección exigibles a todo servidor de este poder del Estado. Así enfocado, semejante obrar, inconciliable con el decoro y la prudencia que impone apego a la juridicidad, contrastaría abiertamente con el desempeño responsable de la jurisdicción".
La decisión tomó en cuenta la actuación de oficio llevada adelante por la secretaría de Control Disciplinario del Tribunal donde se recabaron elementos probatorios a los fines de evaluar el desempeño de la jueza Makintach, en una causa caratulada como "Averiguación de ilícito", radicada ante la UFI número 1 del departamento judicial de San Isidro.
Makintach quedó en la mira luego de que se divulgaran distintos videos en los cuales se la veía caminando por los tribunales de San Isidro, seguida por un camarógrafo, y luego hablando sobre el caso. La magistrada fue denunciada luego de que se detectara la presencia de al menos dos personas no autorizadas para presenciar los alegatos, y mucho menos realizar filmaciones dentro de la sala.
En un principio Makintach negó su vínculo con la productora que estaba realizando el documental, y en la que estaba involucrada su propio hermano; sin embargo, las pruebas halladas por la fiscalía fueron determinantes para separarla del caso y suspenderla.