El técnico del PSG reconoció que “sería increíble” llegar a la definición como locales pero avisó: “Queda mucho trabajo por delante”. A raíz de la invasión que Rusia lleva adelante en Ucrania y el conflicto bélico allí desencadenado, la UEFA decidió cambiar la sede de la final de la Champions, que iba a ser en San Petersburgo, y mudarla al Stade de France en París. De esta manera, si sigue avanzando, el PSG tendrá la posibilidad de definir la Orejona como local y Mauricio Pochettino reconoció que "personalmente es una motivación extra".