Una joven de 18 años se encuentra internada en el Hospital Escuela de Corrientes después de ingresar de urgencia el domingo pasado con una herida de bala en una de sus piernas, trasladada por su madre en un auto particular. Inicialmente, se informó que la herida fue resultado de un robo de celular, pero tras una investigación policial se descubrió que en realidad fue herida por su propio padre luego de una discusión familiar. El padre fue arrestado por las autoridades y enfrenta cargos por lesiones culposas y tenencia ilegal de armas, mientras que la joven continúa en el hospital recuperándose de sus heridas.
La joven de 18 años, identificada como Micaela, relató inicialmente que había sido atacada por "motochorros" en una placita del barrio Pirayuí, atribuyendo la herida de bala a un intento de robo de su celular. Sin embargo, las discrepancias en su relato y el testimonio de su madre llevaron a una revelación impactante.
Tras la confrontación con su madre, Micaela finalmente confesó que el autor del disparo que la hirió en la pantorrilla de la pierna izquierda fue su propio padre, Ramón G. de 44 años. La discusión entre ambos se desencadenó al descubrir mensajes comprometedores en el celular de su padre, lo que desató la violenta reacción que culminó en el disparo.
La rápida intervención policial condujo al arresto del padre, el secuestro del arma de fuego utilizada en el incidente y la apertura de una causa penal por lesiones culposas, tenencia y portación ilegal de armas de fuego. Actualmente, la joven Micaela continúa hospitalizada, recibiendo atención médica y apoyo tras el traumático suceso.
Por su parte, el agresor, Ramón G., fue liberado por decisión judicial, aunque enfrenta las consecuencias legales de sus acciones. La familia y la comunidad se ven sacudidas por este trágico episodio, que pone de manifiesto la importancia de abordar los conflictos familiares de manera pacífica y buscar soluciones que no involucren la violencia.