El vocalista de Black Sabbath falleció este martes, según confirmaron su familia y varios medios internacionales.
Ozzy Osbourne, el legendario cantante británico y uno de los fundadores del heavy metal, murió este lunes a los 76 años. La noticia fue confirmada por su familia a través de un comunicado que rápidamente se viralizó en medios de todo el mundo. Si bien aún no se informó oficialmente la causa del deceso, se sabía que el músico venía atravesando una compleja situación de salud desde hacía años.
Nacido el 3 de diciembre de 1948 en Birmingham, Inglaterra, John Michael “Ozzy” Osbourne fue mucho más que una estrella de rock: fue una figura cultural global, reverenciada por varias generaciones. Su irrupción como líder de Black Sabbath en 1970 marcó un antes y un después en la historia de la música pesada.
Con discos fundamentales como Paranoid, Master of Reality y Sabbath Bloody Sabbath, definió el sonido y la estética del heavy metal.
Tras su salida de la banda a fines de los 70, Ozzy inició una carrera solista que lo consolidó como uno de los artistas más influyentes del género. Álbumes como Blizzard of Ozz, Diary of a Madman y No More Tears lo mantuvieron en lo más alto durante décadas, con himnos como “Crazy Train”, “Mr. Crowley” y “Mama, I’m Coming Home”.
Su figura trasciende lo estrictamente musical. Ozzy también fue un personaje de la cultura pop: a comienzos de los 2000 protagonizó junto a su familia el reality The Osbournes, en MTV, que mostró su intimidad, sus excesos y su entrañable torpeza con la vida cotidiana. Fue una estrella del rock y, al mismo tiempo, una figura entrañable para millones.
En los últimos años, su salud se vio seriamente deteriorada. En 2019 fue operado de urgencia tras una caída que agravó una lesión cervical. Tiempo después confirmó que padecía Parkinson. Desde entonces, sus apariciones públicas fueron esporádicas, aunque nunca perdió el contacto con sus fans.
“Mi cuerpo está destruido, pero mi voz sigue”, había dicho en una entrevista de 2023. A pesar de todo, insistía con su sueño de despedirse en vivo: “No me quiero ir sin volver a tocar para ustedes”.
El mundo de la música y del espectáculo reaccionó de inmediato a la noticia de su fallecimiento. Figuras como Tony Iommi, Sharon Osbourne, Slash, Dave Grohl y muchos más expresaron su tristeza y recordaron su legado. “Ozzy fue y será el alma del metal. Nadie como él”, escribió James Hetfield, de Metallica.
Ozzy deja un legado inmenso, con más de cinco décadas de historia, millones de discos vendidos, influencias incontables y una legión de fanáticos que lo veneran como un dios pagano del rock. Su figura, su voz, sus excesos, su carisma y hasta sus demonios lo convirtieron en un mito viviente.