Día tras día, nuestra existencia se enriquece gracias a la diversidad que nos rodea. El 21 de mayo es un día especial en este sentido, pues se celebra el Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo. Esta fecha, promovida por la Organización de las Naciones Unidas, no solo pone en relieve la riqueza de las culturas del mundo, sino también, y quizás más importante, subraya el papel esencial del diálogo intercultural para alcanzar la paz y el desarrollo sostenible.
Este día conmemorativo se estableció en 2002, tras la aprobación por la UNESCO de la Declaración Universal sobre la Diversidad Cultural en 2001. Esta declaración resalta que la diversidad cultural es tan necesaria para el género humano como la diversidad biológica para los organismos vivos. Esta diversidad, que constituye el patrimonio común de la humanidad, debe ser reconocida y consolidada en beneficio de las generaciones presentes y futuras.
Pero, ¿por qué es tan importante el diálogo intercultural? Según datos de la UNESCO, el 89% de los conflictos actuales en el mundo ocurren en países donde el diálogo intercultural es escaso. Esta estadística nos muestra que es crucial reforzar el diálogo intercultural para establecer una cooperación eficaz y mantener la paz.
Lilia Urquijo, embajadora de la paz en Goya, tiene mucho que decir sobre este tema. En una reciente entrevista para FM Norte, compartió sus pensamientos sobre el Día Mundial de la Diversidad Cultural, que se celebra para promover una mayor comprensión del valor de las diferentes culturas. La idea es mejorar la convivencia entre los pueblos.
"Todo el mundo habla negativamente de la vida. Nosotros estamos haciendo el balance y poniendo en positivo todo lo que somos de evolución humana", dijo Lilia. Y es que este día representa la oportunidad de celebrar los beneficios de la diversidad cultural y recordar el patrimonio que hemos heredado.
Urquijo reflexiona sobre cómo, en nuestra evolución como seres humanos, a veces dejamos de lado cosas importantes: la familia, el amor, la ternura. Nos enfocamos en objetivos materiales, que son finitos y dejan un rastro de destrucción. "Dejamos una huella para siempre. Entonces, ¿por qué nos cuesta? Porque no nos asumimos como responsables de lo que sucede. Dejamos que el otro sea el culpable y eso nos libera un poco la angustia que produce la responsabilidad como persona adulta, manejando una familia, un auto, un arma, un trabajo", reflexiona.
La embajadora de la paz nos insta a ser más conscientes de nuestras acciones, a dejar de lado la ignorancia y a informarnos cada día sobre lo que podemos hacer para mejorar. "Es simple la ecuación: hay que dedicar amor, tiempo. Un segundo que no le dedique es importantísimo. Un segundo que no mire puede provocar un desastre. Es sencillo de decir, pero hay que hacerlo conscientemente y diariamente. Para eso estamos", concluye Lilia.
El Día Mundial de la Diversidad Cultural para el Diálogo y el Desarrollo es un recordatorio de la riqueza que nos brinda la diversidad cultural y de la importancia del diálogo intercultural para fomentar la paz y el desarrollo sostenible. Tomémonos un momento para reflexionar sobre cómo podemos contribuir a este objetivo en nuestra vida diaria. Porque, como bien dice Lilia Urquijo, "un segundo que no mire puede provocar un desastre".