¿Estuviste tomando sol, disfruntando del rio o la pileta o simplmente saliste al medio día y viste este fenómeno que te llamó la atención? Si es así, has tenido ante tus ojos el fenómeno del halo solar, que constituye, junto con las auroras boreales y las descargas eléctricas, una de las manifestaciones más bellas y soberbias que nos brinda el cielo.
La aparición de este "ornamento celeste" se puede observar con relativa frecuencia en nuestras latitudes a lo largo de cualquier estación del año, aunque es más común observarlo en latitudes más altas. Puede que verlo nos resulte sorprendente e inexplicable, por ello, queremos darte a conocer qué es un halo solar y por qué se produce.
Por cierto, mucho cuidado al observarlo: ¡siempre hay que tratar de tapar el Sol para evitar posibles daños en los ojos! Nos podemos ayudar para ello ocultándolo con el contorno de un árbol, edificio, farola, etc., y, si no, con nuestras propias manos. También es recomendable llevar gafas de sol.
Qué es un halo solar
El halo solar, aro iris o antelia es un fenómeno óptico atmosférico (o fotometeoro) que aparece en el cielo en forma de aro, círculo o anillo coloreado y luminoso con el Sol situado en el centro del mismo. Estas son las características del halo solar.
Diferencia entre el arcoíris y el halo solar
Aunque tanto el arcoíris como el halo solar son fenómenos ópticos que podemos contemplar en la atmósfera, no debemos confundirlos entre sí. Algunas diferencias entre el arcoíris y el halo solar fundamentales son:
- El arcoíris es mucho más frecuente y conocido que el halo solar o antelia.
- El arcoíris se observa sobre el horizonte y siempre en la dirección opuesta a donde se sitúe el Sol.
- El halo solar se forma en presencia de pequeños cristales de hielo, mientras que el arcoíris lo hace en presencia de gotitas de agua (el Sol debe iluminar una cortina de lluvia).
- Lo más común es que los colores sean más nítidos y numerosos en el arcoíris.
- De la parte exterior a la interior, la gradación de colores es justo la contraria; así, los colores van del rojo al violeta para el arcoíris y del blanquiazul al rojo para el halo solar.
- Los halos solares se dan comúnmente antes de la llegada de un frente cálido, mientras que el arcoíris se forma cuando las lluvias ya han comenzado.