El actual secretario de Hacienda de la Municipalidad, y docente universitario y ex dirigente del PJ hizo un análisis de los resultados, el día después de las elecciones PASO. Hizo hincapié en que hay un peligro concreto de que la Argentina llegue al precipicio y “caiga al abismo”.
En declaraciones al programa “Viendonos” que se emite por canal 2 de Gigared, el contador Giuliani dijo: “Yo creo que cuanto más cerca del abismo se sienta la dirigencia política, más cerca se estará de la construcción de un consenso. Porque la dirigencia política es la que más va a perder si la Argentina cae en el abismo de catástrofe de convivencia. Yo tengo la convicción. Va a llegar el momento en que la necesidad de consensos mínimos, de convivencias se va a tener que producir. Es un enfrentamiento que se creó en la grieta que nos llevó a una situación en la que prácticamente el diálogo entre las fuerzas mayoritarias no es que generaran lo que pasó el domingo en las PASO. Pero sí, abonaron el camino para que este mar de incertidumbres con muchas consecuencias malas en el corto plazo sean reversibles en el corto y mediano plazo”.
SOCIEDAD DESCONTENTA
“El descontento de la sociedad se puede medir en la cantidad de votos que sacó Milei. Termina votando el 68 por ciento cuando en las PASO del 2019 había votado el 75 por ciento, siete puntos porcentuales del padrón nacional. Es gente que no se sintió atraída por ninguna de las ofertas y por lo tanto desistió de ir a votar, que era un derecho pero también una obligación de menores de 70 años”, dijo.
MESES DIFICILES
“Nos esperan un par de meses complejos para quien tiene en sus manos la administración nacional y en una circunstancia como la actual, la oposición se va a desentender de involucrarse de la enorme dificultad que va a tener que atravesar el oficialismo. Pero también hay que ver que la dirigencia, cuando lleguen circunstancias que se pueden generar en el plazo de los dos meses pueden producir un cambio en la actitud que implique la necesidad de encarar el dialogo político con otro tipo de perfil. Es decir, no esperar a arañar el precipicio como para poder, de alguna manera tener que sentarse los principales actores y los principales agentes económicos del país, y otros sectores para lograr mínimos entendimientos. Y no generarnos una situación de padecimientos a todos los argentinos que yo no se si estamos en condiciones de soportar”, opinó.
UN KILO DE CAFÉ
Recordó Giuliani lo que cobraban los jubilados en los años ochenta: “hace algunas décadas, la gente era mucho más tolerante para enfrentar las dificultades económicas como la actual. Yo entonces trabajaba en un banco privado. En esa época no había el sistema que tienen actualmente los jubilados que es la acreditación en caja de ahorro de las jubilaciones. Tenían que ir los jubilados al banco con su documento de identidad, lo presentaba en el mostrador, el que estaba ahí le daba el recibo, pasaban por la caja y se llevaban el efectivo. Algunas veces me tocaba hacer ese trabajo. Y miraba los recibos en el año 89 previo al canje de los depósitos de plazos fijos por BONEX. Ese 13 de diciembre de 1989, Herman Gonzalez (ministro de Economía) tomó esa medida. Fue el primer arañazo de algo que parecía que era sagrado en la Argentina que eran los depósitos en plazo fijo”.
“Yo miraba los recibos de los jubilados y lo único para lo que le alcanzaba al jubilado para todo el mes era para como para comprar un kilo de café y nada más. Cuando tenemos un panorama de incertidumbre le estamos haciendo el caldo gordo a la especulación. El especulador gana mucho en el panorama de incertidumbre y quien pierde en ese campo es el sector de ingresos fijos, el trabajador. Si llegáramos a esa situación estaríamos al borde del precipicio como tejido social y con muchas dificultades de reconstruir una mínima disciplina social que nos permita volver a ser una sociedad civilizada”, dijo.