Con trámites a favor de Juan Vicente Gómez Botello y José Jacinto Rolón, cuenta los escritos, se inicia un largo expediente para lograr la erección de la Parroquia de Goya, que fuera un logro tras dilatadas gestiones en torno a ese objetivo.
Propósito que se logra con el Decreto correspondiente de fecha 19 de mayo de 1825, por aprobación del provisor de Buenos Aires, José León Benegas.
El mencionado decreto erigía el “nuevo curato” con el Título de Nuestra Señora del Rosario, en el Puerto de Goya, desmembrado del de San Roque. Y débasele -acuerda el Decreto- por feligreses, todos los vecinos estantes y habitantes dentro de la demarcación del territorio…. Con inclusión de la capilla de (Santa Rita) de la Esquina, que por ahora servirá de ayuda de parroquia del dicho nuevo curato, como igualmente servirá a esta parroquia la Capilla de Goya, ínterin y hasta tanto se construya la Iglesia Parroquial.
Según cuenta los registros, en Goya se abrieron los libros parroquiales como filial de San Roque, con el primer bautismo el 13 de diciembre de 1819.
Es oportuno recordar que nuestro pueblo fue elevado al rango de Villa por Ley promulgada el 19 de febrero de 1825, dos meses antes de obtenerse su Iglesia parroquial; para destacar el dato histórico, gobierno de Pedro Ferré y ejerció el curato en Goya Fray Pascual Serrano.
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