No podemos terminar el día sin recordar al patrono de los embarazos y las parteras. Conocé su vida y cómo se le reza.
Nacido en Portell, una pequeña localidad del sur de España, su nombre real era Ramón de Peñafort. Su nacimiento fue particular, ya que llegó al mundo por cesárea, una práctica poco común para la época, con la particularidad de que fue extraído del útero de su madre cuando ella estaba muerta. Por este motivo adquirió su epíteto: Nonnatus (no nacido, en latín).
Desde muy joven mostró un gran interés por la religión. A los 18 años, ingresó a la Orden de los Mercedarios, la cual se dedicaba a la redención de los cristianos cautivos en manos de los musulmanes. Años más tarde lo enviaron a Argelia como parte de una misión de rescate de cautivos. En una oportunidad se ofreció como rehén en lugar de un cristiano que estaba a punto de ser ejecutado. Fue llevado a prisión y sufrió torturas y maltratos por su fe, pero se negó a renunciar a ella. Finalmente, fue liberado gracias a la intervención de su orden y regresó a España. Tras su vuelta lo ordenaron sacerdote y se convirtió en un gran predicador, ganando fama por su sabiduría y caridad hacia los pobres y enfermos. El 31 de agosto de 1240, a los 36 años falleció en el convento de San Nicolás.
ORACIÓN A SAN RAMON NONATO
¡Oh! Glorioso San Ramón, a cuyo poder sometió Dios la tierra y los elementos, la salud y la enfermedad, la vida y la muerte, hallando en vuestra poderosa intercesión, abogado las doncellas, sucesión las casadas, defensa los que se ven calumniados, cosecha los labradores, puerto los náufragos, redención los cautivos, vista los ciegos y fin todos los males; por aquel vuestro ardiente deseo de recibir el Santísimo Sacramento, que obligó a Jesucristo a daros de sus benditas manos la sagrada Comunión, os suplico intercedáis por mí para que merezca frecuentar este celestial convite, y recibirle por Viático al fin de mi vida, y sobre todo que pueda obtener la gracia especial que os pido y la eterna felicidad de la gloria.