Por Lic. Gladis Viviana Oritz (*)
Desde los primeros trazos de su historia, el idioma español ha sido un viaje a través del tiempo, un mosaico de influencias que lo han moldeado y enriquecido. Una de las influencias más profundas, duraderas y fascinantes es el latín, una lengua que sigue latiendo en cada rincón de nuestro español contemporáneo. En este artículo, exploraremos cómo el latín ha dejado su huella en nuestro idioma, convirtiéndose en los cimientos y alas que lo hacen tan extraordinario.
Los Cimientos del Idioma
Para entender la influencia del latín en el español, debemos retroceder en el tiempo, a la Hispania romana, cuando los legionarios y colonos llevaron consigo la lengua latina a la península ibérica. Esta lengua madre se mezcló con las lenguas locales, dando lugar a lo que conocemos como latín vulgar, el antepasado directo del español.
El latín dejó en herencia una estructura gramatical sólida y un vasto repertorio léxico. Palabras como "amor," "sol," "puerta," y "mesa" encuentran sus raíces en el latín, formando la base de nuestro vocabulario cotidiano. Además, el latín aportó una riqueza gramatical que permite una expresión precisa y matizada en español.
Las Alas de la Creatividad
Sin embargo, la influencia del latín en el español no se limita a las palabras prestadas o a las estructuras gramaticales. El latín ha sido el trampolín de la creatividad lingüística, permitiendo la formación de neologismos y la evolución de palabras. Los escritores y eruditos del Renacimiento y del Siglo de Oro español recurrieron al latín para crear palabras y conceptos nuevos. Así, palabras como "computadora" (del latín "computare," que significa calcular) o "automóvil" (del latín "auto," que significa por sí mismo, y "mobilis," que significa móvil) tienen su origen en el latín.
Además, el latín sigue vivo en expresiones y locuciones latinas utilizadas en la literatura, el derecho, la medicina y otras disciplinas. Términos como "ad hoc," "ex post facto," "in situ," y "viceversa" son ejemplos de cómo el latín ha enriquecido el español con una dimensión cultural y técnica que va más allá de las palabras individuales.
Un Vínculo con la Historia y la Cultura
El latín no es solo un componente lingüístico, sino un vínculo con nuestra historia y cultura. Estudiar el latín es sumergirse en las raíces mismas de la civilización occidental. La influencia del latín se extiende a través de los siglos y las fronteras, uniendo a hablantes de español con personas de otras lenguas romances, como el italiano, el francés y el portugués.
En resumen, el latín es el fundamento y el motor que impulsa al español. Es la esencia misma de nuestra lengua, la clave que abre las puertas a la creatividad y la comunicación en todas sus formas. Reconocer la influencia del latín en el español es celebrar nuestra herencia cultural y lingüística, y apreciar la profundidad y la belleza de un idioma que sigue evolucionando y sorprendiendo, gracias a sus raíces latinas.
(*) Licenciada en Letras. Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), Licenciada en Gestión Educativa. Universidad de Santiago del Estero (UNSE) y Profesora de Lengua y Literatura.
Realizó diversos postgrados en el marco del Doctorado en Letras. Fue Presidente de la S.A.D.E Seccional Goya